Mastopexia : Doctor tengo el pecho caído

Mastopexia

¿Por qué una mastopexia? Cada día más mujeres acuden a nuestras consultas para “arreglarse el pecho” tras haber tenido hijos, o a partir de cierta edad. Todas ellas se quejan de que el pecho les ha quedado caído, sin forma y como vacío.

Doctor…tengo el pecho caído…

El pecho caído o vacío ocurre porque durante el embarazo y la lactancia hay un incremento acusado de la glándula mamaria, y por tanto de la piel. Tras la retirada hormonal, la glándula involuciona y se atrofia, con lo que la mama pierde volumen. Sin embargo, la piel se retrae menos y se da una distensión del sistema de ligamentos de la mama que provoca que la mama “se caiga”.

¿En qué consiste la mastopexia?

Según la posición de la glándula con respecto a la areola y al surco submamario, distinguimos tres tipos de ptosis (término empleado para designar a la caída de la mama). La técnica empleada, denominada mastopexia, dependerá de la posición del complejo areola-pezón, del volumen de la glándula residual y de la piel sobrante.

En la mayoría de los casos se emplea una técnica combinada de resección de la piel sobrante y un aumento de mama.

Reducir cicatrices

Una de los temas que más preocupan tanto a las pacientes como a los especialistas es el de las cicatrices. ¿Qué podemos hacer para disminuir su presencia?

El primer paso es valorar la posibilidad de un aumento mamario. La nueva técnica de aumento subfascial permite rellenar la mama vacía y evitar el abordaje areolar. En muchas ocasiones se evita también la extracción de piel y por tanto, la presencia de cicatrices.

Si la mujer no quiere aumentar el volumen de su pecho la técnica cambia. En esos casos se remodela la glándula por dentro, hasta situarla en su posición original, darle proyección y conseguir que adopte una forma más juvenil. Si no hay volumen suficiente hay que poner un implante para dar volumen y además reducir la cantidad necesaria de piel a extirpar.

La cirugía se realiza con anestesia general, dura entre 90 y 120 minutos y suele requerir una noche de ingreso.

Debes saber que…

Tras la intervención hay que llevar un sujetador día y noche durante un mes para que la glándula cicatrice en su nueva posición. A los tres o cuatro días se puede reiniciar la vida laboral normal.

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